¿Sueñas con trabajar profesionalmente en cocina o pastelería pero no conoces el mundo de la gastronomía?

¿Quieres saber si tienes las cualidades de un buen cocinero profesional antes de trabajar en cocina?

¿Te interesa saber qué enseñamos en los cursos profesionales de cocina y pastelería de la Escuela TdEs a nuestros alumnos ?

Cualidades de un buen cocinero y de un puesto de trabajo digno

Un buen cocinero conoce las cualidades que se convierten en exigencias cuando empiezas a trabajar en un restaurante.

Estas cualidades van más allá del título de académico y debemos cumplirlas siempre, dentro y fuera de la Escuela y del restaurante donde se trabaja.

Cuando hablamos de exigencias en cocina, nos referimos a las cualidades que necesita un profesional de la hostelería para ejercer su trabajo.

A modo de resumen, os exponemos algunas exigencias básicas que un buen cocinero siempre debe respetar.

Las ocho cualidades fundamentales de un buen cocinero

• Compostura

Los ademanes y actitudes durante su trabajo han de ser siempre correctos. Más aún cuando estamos a la vista de nuestros clientes.

• Educación

El trabajo bien hecho, se convierte en negativo cuando las formas y modos empleados no son las correctas. La brigada de cocina debe estar compuesta por compañeros, cosa difícil si falta la educación.

• Puntualidad

Cada preparado de cocina requiere un tiempo muy fijo, si no se empieza en su momento, no podrá estar a punto cuando haya de servirse. Tampoco es buena solución acortar el tiempo del plato

• Organización y previsión

La organización y la previsión facilitan el trabajo armónico de la cocina. Todo debe estar ordenado y en su sitio para conseguir una buena  “mise en place”

• Buena administración

Al cocinero profesional, como parte integrante de una empresa de producción, se le exige la lógica y la colaboración en la obtención de beneficios.

Confiar a sus manos materiales y géneros alimenticios de gran valor económico, le convierte en un administrador de departamento o de partida, dentro de la administración general del establecimiento.

• Sentido de la responsabilidad

Se refiere a la atención máxima que un cocinero profesional debe poner en su trabajo para evitar el menor fallo en su misión.

Este fallo, altamente perjudicial para la buena marcha del negocio, es más visible que los que puedan producirse en otros departamentos

• Deseos de perfeccionamiento

Siempre existe la posibilidad de ampliar y mejorar los conocimientos mediante cursos profesionales de cocina y pastelería. Para un buen cocinero esto es fundamental.

• Y en fin lo más importante Vocación

El horario diferente al normal, las temperaturas extremas, la rapidez en las técnicas y la tensión nerviosa que esto origina en muchos casos sólo puede superarse gracias a una firme vocación y orgullo profesional.

En el oficio de un profesional de la cocina hay normas que se imponen y exigencias que nacen para ser un buen trabajador del sector hostelero.

Pero hay que tener cuidado para no caer en el servilismo: una obediencia ciega e indigna a una persona. La principal característica de esta definición, se refiere a la naturaleza baja o indigna de esa obediencia.

Quiero ser chef

¿Cuándo una empresa está pidiendo servilismo?

Es una pena que en el siglo XXI, cuando hablamos de restauración todavía tengamos que hablar en algunos casos de servilismo.

Las largas jornadas laborales sin cumplimiento de horarios, los inexistentes descansos, días de fiesta o vacaciones, todavía son herramientas que utilizan algunos restaurantes en la gestión de su personal.

El resultado de este servilismo del siglo XXI, pasa factura a Escuelas, Restauradores, profesionales y clientes.

Tenemos una situación laboral que demanda cada vez más, mejores profesionales de cocina y de sala, pero la realidad es que somos incapaces de atender esta demanda.

Las exageradas condiciones laborales que practican algunas empresas de Restauración, no pueden ser atendidas por aquellos profesionales que tengan orgullo profesional.

Desde las Escuelas de cocina y Pastelería tenemos la obligación y la responsabilidad de ofrecer a los futuros profesionales de Cocina y Pastelería un conocimiento cada vez más amplio.

Pero las empresas deben dotarlos de las herramientas necesarias para poder responder a las demandas de sus clientes y gestionar con éxito el negocio.

El dominio de las técnicas de cocina y pastelería y los números no son suficientes. Estos profesionales requieren ahora más que nunca, un trato digno y profesional como cualquier otro trabajador.

No nos olvidemos de la seguridad

La seguridad de los alimentos es el aspecto más serio de la cocina. Una imposición. Se refiere a una obligación, algo que no se puede ni obviar ni ignorar.

Seguridad y higiene en el trabajo son normas establecidas por ley, que no solo afectan a los clientes, sino que también aseguran al trabajador frente a los riesgos laborales en los cuales puede incurrir.

Prevenir las Intoxicaciones alimentarias

Seguridad y buen gusto: si se puede

Una cuestión que muchos amantes de la cocina prefieren ignorar, pero que ningún cocinero profesional debería ignorar.

Es posible preparar comidas que sean deliciosas y seguras al mismo tiempo, pero se necesita conocimiento, esfuerzo y trabajar siguiendo principios que no son tan simples. Porque la mayoría de alimentos y microbios no los son. Pero todo cocinero, debe realizar este esfuerzo, por su propio bien y por el de los demás.

Los trabajadores tienen derecho a una protección eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo.  El empresario debe ofrecer una protección a los trabajadores frente a los riesgos laborales de los empleados a su cargo.

A pesar de esta obligación, más de la mitad de las empresas de Restauración, no contemplan ningún plan de prevención de riesgos laborales

Autor: El Director de la Escuela Sergi Meléndez Giner

Editing: Manuela Pirrone

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